La directora territorial de Trabajo y Asuntos Sociales en el Camp de Tarragona, Marta Cassany y la jefa del servicio de Atención a las personas mayores, Lourdes González-Casabon, han mantenido una reunión esta tarde con la junta directiva de la CET para tratar, entre otras cuestiones, sobre las listas de espera en los centros de día, las residencias y las ayudas a la dependencia. En este sentido, las cifras aportadas por la Generalitat es que en todo el Tarragonès, las listas de espera para las residencias suman un total de 130 personas. El tiempo de espera máximo es para la residencia de la Mercé, con un total de 2 años.
Sin embargo, tanto Cassany como González-Casabon apuntan que la Mercè está en plenas obras de ampliación, por lo que se ganarán 80 plazas y esto ayudará a esponjar considerablemente las listas de espera.
En cuanto a los centros de día, en la reunión se ha informado de que muchos usuarios se apuntan preventivamente, pero cuando les toca, renuncian a la plaza y vuelven a entrar en las listas, por lo que las cifras no son del todo reales. Así, el año pasado, de 349 inscritos, constan 219 renuncias en todo el Camp de Tarragona. Destaca especialmente el caso de los municipios de L’Espluga de Francolí y de Montblanc, donde algún usuario llega a concentrar hasta quince renuncias.
La CET también ha trasladado a la reunión las quejas recibidas sobre las ayudas a la dependencia y se ha puesto sobre la mesa la necesidad de un reglamento único para todos los entes locales que unifique las condiciones. El procedimiento es que la Generalitat abona a los ayuntamientos las ayudas y estos les pagan a los usuarios, pero no todos lo hacen de forma instantánea. Por este motivo, muchos beneficiarios deben adelantar el dinero y no todas las unidades familiares pueden asumirlo. Finalmente, se acordó mantener un contacto periódico, preferiblemente en reuniones trimestrales, pero también de forma digital.
